Vulnerabilidad de mujeres migrantes durante desastres: una revisión de alcance en la literatura

Vulnerabilidad de mujeres migrantes durante desastres: una revisión de alcance en la literatura

La vulnerabilidad durante los desastres se entiende como las condiciones determinadas por factores físicos, sociales, económicos y ambientales que incrementan la susceptibilidad de los individuos para experimentar un impacto desproporcionado y sufrimiento en términos de mortalidad, morbididad y pérdidas. Existen grupos dentro de la población que son más vulnerables durante los desastres, entre ellos, los migrantes y las mujeres, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el Marco de Gestión de Emergencias Sanita rias y Riesgos de Desastres (H-EDRM) publicado en el 2019.

Esta revisión buscó responder a la pregunta: “¿Cómo experimentan vulnerabilidad las mujeres migrantes durante desastres en sus países de residencia?”, con el análisis de 14 estudios cualitativos llevados a cabo mediante entrevista a esta población durante los años 2020 y 2021 durante la pandemia de COVID-19.

Se encontraron seis factores de vulnerabilidad: estatus legal, pobreza, condiciones de salud preexistentes, agencia limitada, desigualdad de género y barreras del lenguaje y culturales. A su vez, estos factores de vulnerabilidad ya mencionados resultaron en nueve impactos: empeoramiento del estado de salud mental, pobre acceso a la atención, empeoramiento de las condiciones de salud física, fraude, exacerbación de la pobreza, violencia de género, peligro del camino educativo e insatisfacción de necesidades religiosas.

Estatus legal

Durante la pandemia de COVID-19, las mujeres migrantes fueron víctimas de discriminación. En cuanto al acceso a la atención médica, en India las mujeres embarazadas e infantes migrantes fueron excluidos de la atención prenatal por diversas causas como limitación del personal médico, medidas de bloqueo y temor de los salubristas por contraer la infección, generando así que hubiera partos en casa y no-administración de vacunas. En Canadá, trabajadoras migrantes desde China fueron culpadas de haber importado el virus, limitando así su acceso al trabajo. Por otra parte, en Estados Unidos, ellas temían por su seguridad debido al clima político relacionado con inmigrantes y el incremento de compra de armas por parte de los ciudadanos. También hubo incertidumbre sobre su estancia, ya que la pandemia generó demoras en la adquisición y renovación de visas y residencias. A su vez, mujeres migrantes indocumentadas no buscaban atención médica por temor a ser deportadas. Además, también sus ingresos económicos se vieron afectados, ya que, por su estado legal, visa temporal o trabajos informales, no percibían beneficios del estado; volviéndolas susceptibles a fraude. Por todo esto, su salud mental también se vio impactada de manera negativa.

Pobreza

Las mujeres migrantes viven en condición de vulnerabilidad debido a la pobreza y ésta se exacerbó durante la pandemia de COVID-19. Unas de las razones fueron la inestabilidad laboral, los bajos ingresos económicos y la imposibilidad de ahorrar. En Canadá se implementó una ley que consistía en tener un único empleo para prevenir los contagios, lo cual impedía que pudieran tener varios trabajos para subsistirse. A pesar de las medidas de aislamiento y de restricción en el transporte, algunas no podían ni siquiera rea lizar pagos electrónicos porque no tenían cuenta bancaria o acceso a internet. La situación económica ocasionaba que no pudieran pagar sus rentas y tuvieran que mudarse a lugares de hacinamiento.

Condiciones de salud preexistentes

Se reportaron enfermedades preexistentes como infección por VIH, insuficiencia renal, hipertensión arterial sistémica, alergias y diabetes que, durante la pandemia de COVID-19, no pudieron recibir tratamiento por las limitaciones en el acceso a la salud ya sea por la discriminación previamente mencionada o por la priorización de la atención de COVID-19. Los trastornos mentales tampoco fueron tratados durante la pandemia e incluso se exacerbaron, especialmente en mujeres migrantes que previamente habían vivido eventos traumáticos. Se incrementó también el riesgo de autolesiones y pensamientos suicidas.

Agencia limitada

Durante la pandemia de COVID-19, las mujeres perdieron autonomía y la capacidad de toma de decisiones. Algunas tuvieron que interrumpir o posponer sus estudios; otras no podían cubrir sus necesidades religiosas.

Desigualdad de género

Durante la pandemia de COVID-19, aumentó la carga de trabajo en casa para las mujeres migrantes porque además de trabajar remotamente, debían cuidar a sus hijos quienes ya no asistían a la escuela; generando empeoramiento de su salud mental debido a estrés y ansiedad. También incrementó la violencia hacia ellas, especialmente la violencia sexual y de pareja, como consecuencia de tener que permanecer en casa; sin embargo, debido a la crisis económica, se volvieron dependiente de sus agresores, lo cual impedía que abandonaran ese ambiente hostil. En algunos casos, fueron forzadas a la prostitución.

Barreras del lenguaje y culturales

El lenguaje y las barreras culturales hacen que las mujeres migrantes tengan dificultad para acceder a los servicios de su país de residencia. Durante la pandemia, las mujeres tuvieron limitaciones en obtener información sobre el COVID-19 por las barreras en el lenguaje.

Discusión y conclusión

De los 14 artículos que fueron incluidos en esta revisión, se puede concluir que la pandemia de COVID-19 impactó de manera negativa a las mujeres migrantes debido a factores de vulnerabilidad como su estatus legal, pobreza, condiciones de salud preexistentes, agencia limitada, desigualdad de género y barreras del lenguaje y culturales. Se pudo observar que, de todos ellos, su estatus legal, condiciones de pobreza y condiciones de salud preexistentes (especialmente relacionadas con la salud mental), les generaron mayor impacto durante este desastre. Durante ese periodo fueron víctimas de discriminación, limitación en la atención médica que provocó empeoramiento de sus enfermedades, especialmente mentales, fraude, violencia y empeoramiento de su situación económica al no contar con ayuda gubernamental ni con trabajos es tables. Todo esto debería incentivar la creación o fortalecimiento de asociaciones, grupos y/o organizaciones que brinden apoyo a las mujeres migrantes durante desastres, convirtiéndose así un importante tema de la salud pública.

  • Lorena Belén Yépez Rodríguez
Bibliografía
  • Trentin, M., Rubini, E., Bahattab, A. et al. (2023). Vulnerability of migrant women during disasters: a scoping review of the literature. International Journal for Equity in Health, 135, 1-22. https://doi.org/10.1186/ s12939-023-01951-1