Eventos adversos en la infancia y problemas de salud mental en sobrevivientes de cáncer: una revisión sistemática

Eventos adversos en la infancia y problemas de salud mental en sobrevivientes de cáncer: una revisión sistemática

La infancia es un periodo delicado de la vida, con un rápido desarrollo físico, neurológico, cognitivo, emocional y social. Experimentar múltiples eventos adversos durante la infancia (ACE, por sus siglas en inglés), cómo perder a un padre, el abuso físico o tener un padre con una enfermedad mental, son factores de riesgo bastante conocidos en el ámbito de los problemas de salud física y mental en la edad adulta.

El estudio asegura que las personas que experimentan más eventos adversos durante la infancia tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, enfermedades respiratorias y cáncer. Además, se cree que son susceptibles de desarrollar depresión, ansiedad y trastornos de estrés postraumático.

Su objetivo es explorar sistemáticamente la relación entre los eventos adversos en la infancia y los problemas de salud mental en sobrevivientes de cáncer y cómo es que esta información puede guiar mejores prácticas en la atención médica.

Se revisaron bases de datos como PubMed, PsychINFO, Web of Science y Cochrane para encontrar estudios relevantes hasta agosto de 2023. Se evaluaron 1,413 referencias en 25 estudios seleccionados para el análisis.

A continuación se presentan los principales resultados encontrados.

  1. Características generales de los estudios:
    • La mayoría se llevó a cabo en Estados Unidos (76%).
    • Las muestras incluyeron entre 20 y 1,343 participantes, con una media de 110.
    • Predominaron los estudios en sobrevivientes de cáncer de mama con un 64%.
  2. Prevalencia de ACE:
    • Entre el 40% y el 95.5% de los participantes reportaron haber experimentado al menos un efecto adverso en la infancia.
  3. Problemas psicológicos asociados con ACE:
    • Depresión y ansiedad:
      • 10 de 12 estudios encontraron una relación significativa entre los eventos adversos en la infancia y niveles más altos de síntomas depresivos.
      • 7 de 9 estudios indicaron que los eventos adversos en la infancia estaban asociados con mayor ansiedad.
      • En un estudio entre sobrevivientes de cáncer de mama se reportó que la negligencia y el abuso emocional se asociaron con niveles iniciales más altos de depresión, pero no con cambios en los síntomas depresivos a lo largo del tiempo, mientras que la negligencia física fue un predictor significativo de niveles más altos de estrés a lo largo del tiempo, pero no del nivel de estrés inicial.
    • Fatiga:
      • En 6 de los 7 estudios se identificaron patrones de fatiga elevados y persistentes en sobrevivientes con historial de eventos adversos en la infancia.
      • Los sobrevivientes que sufrieron dolor severo y alta alteración del sueño informaron las tasas más altas de violencia familiar en la infancia, contacto físico forzado y sexo forzado a una edad menor de 16 años.
    • Otras variables:
      • ACE debido al cáncer se asoció con angustia psicológica, pensamientos intrusivos, peor calidad de vida, ideación suicida y alteraciones del sueño.
      • ACE también se asoció con un peor bienestar emocional, aumento de síntomas depresivos, ansiosos, y/o síntomas físicos; además de una peor calidad de vida después del cáncer.
  4. Mecanismos subyacentes:
    • Los efectos de los eventos adversos en la infancia pueden deberse a:
      • Cambios biológicos, como respuestas inflamatorias alteradas.
      • Modelos psicológicos, como esquemas desadaptativos.
      • Factores sociales, como menor apoyo durante el tratamiento.

Discusión

La revisión sistemática de este articulo sugiere que los eventos adversos en la infancia son frecuentes entre los sobrevivientes de cáncer resaltando que más del 50% de los pacientes han enfrentado ACE. Las experiencias traumáticas influyen significativamente en la aparición de trastornos como ansiedad, depresión, fatiga crónica y estrés postraumático, afectando además su capacidad para adaptarse a la enfermedad, sus tratamientos y su exposición, lo que lo convierte en un factor de riesgo significativo para problemas de salud mental.

En conclusión, el impacto del cáncer en la salud mental no puede separarse del historial traumático de los pacientes por lo que se destaca la necesidad del enfoque de atención médica detectando y abordando estas experiencias para así mejorar la atención integral y evitar la retraumatización de los pacientes.

Hay que recordar que las diferentes formas de eventos adversos en la infancia tendrán efectos específicos; por ejemplo, el abuso emocional y físico usualmente está vinculado con depresión y ansiedad, mientras que la negligencia física puede influir en la fatiga. Estas diferencias son las que hacen hincapié en la urgencia de diseñar intervenciones personalizadas para abordar las múltiples dimensiones de la experiencia traumática.

La implementación de este tipo de estrategias de atención basadas en el trauma será esencial para promover una recuperación más completa en el individuo. Esto no solo mejoraría la calidad de vida de los sobrevivientes, sino que también contribuiría a su bienestar emocional, considerando las complejas interacciones entre el trauma pasado y los desafíos afectivos que impone el cáncer.

  • Elsy Fernanda Marinero Navarrete
Bibliografía
  • Hinnen, C., von Haeseler, E., Tijssens, F., & Mols, F. (2024). Adverse childhood events and mental health problems in cancer survivors: a systematic review. Supportive care in cancer, 32(1), 80. https://doi.org/10.1007/s00520-023-08280-7