El trastorno obsesivo-compulsivo genera diversos niveles de discapacidad funcional. Si bien muchos pacientes mejoran con los tratamientos, en un número importante de casos persiste parte los síntomas y no hay mucha evidencia sobre que tan efectivos son los tratamientos a largo plazo. En este estudio observacional de seguimiento, se identificaron factores predictivos de la respuesta terapéutica y de la remisión.

Las alteraciones de los ritmos circadianos forman parte del trastorno bipolar y los cambios del ciclo sueño-vigilia son factores asociados a un riesgo mayor de recaídas. En muchas ocasiones los problemas del sueño pueden ser pródromo de las fases de manía y de depresión. También se ha comprobado que aún en fases de remisión, los pacientes bipolares muestran patrones más cortos y más variables de actividad circadiana. Este estudio con un hipnótico que actúa a través de los receptores de melatonina, muestra que también este tipo de intervenciones puede ayudar a la estabilización de la enfermedad.

La administración de litio se ha asociado a un efecto de neuroprotección en los trastornos del ánimo y en las enfermedades de tipo neurodegenerativo como la enfermedad de Alzheimer. Es por ello que un reciente artículo se dio a la tarea de revisar esto.

El modelo de adicción a la comida para explicar el incremento de peso de algunos individuos ha sido propuesto para comprender el acelerado avance de la obesidad. En este artículo se comparan las similitudes y diferencias de los parámetros neuroquímicos y estructurales entre los sujetos con adicción a sustancias de abuso y los sujetos con trastornos de la conducta alimentaria.